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Optimización de equipos con Big Data

La complejidad de los momentos que muchas empresas están viviendo durante esta crisis les lleva a plantearse medidas extraordinarias que les permitan optimizar los equipos directivos y de proyecto, para hacerlos más efectivos y de mayor impacto. Para ello muchas organizaciones tendrán que tomar decisiones que, mejor ¡tomarlas basándose en datos!

Las empresas que se están enfrentando a estos desafíos y se preguntan:

  • ¿Quién está mejor preparado para afrontar los retos de negocio?
  • ¿Quién encaja mejor en la dinámica de cada uno de los equipos?
  • ¿Tengo los equipos dimensionados adecuadamente?
  • ¿Se podría mejorar la interacción entre estos y otros equipos de la organización?
  • ¿Cómo puedo mejorar su integración y alineamiento para alcanzar resultados?

 

Desde 2001 Augere acompaña a las organizaciones en sus procesos de alineamiento de personas y equipos, cultura y estrategia de negocio, apoyándonos en herramientas avanzadas y nuevas tecnologías de diagnóstico e intervención.

 

Augere pone al servicio de sus clientes herramientas de assessment del perfil profesional altamente contrastadas, aportamos valor a través de datos fiables para la evaluación de personas y equipos, que les permitan tomar decisiones acertadas y fundamentadas en datos.

Nuestra evaluación del perfil de competencias profesionales de individuos y equipos se realiza completamente online en cinco idiomas y cuenta con una base de datos de más de 400 mil perfiles evaluados en más de 25 países, que podemos estructurar en hasta 9 criterios para establecer comparativas. El informe individual que cada una de las personas evaluadas recibe está valorado en 299€ y, ahora, lo ofrecemos a nuestros clientes completamente gratis durante un tiempo limitado.

Estos son los beneficios que obtendrás:

  1. Realiza una evaluación del perfil de competencias profesionales de los miembros de tu organización y consigue, completamente gratis, el informe individual descriptivo de 18 competencias certificado valorado en 299€.
  2. Las personas evaluadas podrán comparar su perfil profesional con el de más de 400.000 perfiles de nuestra base de datos, seleccionando los criterios de comparación que más convenga, de entre los nueve criterios en los que la información está estructurada.
  3. Profundiza en la información de valor añadido que te ofrecen las posibilidades de comparación de perfiles los competenciales entre los miembros del equipo, entre equipos, con perfiles de otras organizaciones y mucho más.
  4. Toma decisiones de reorganización de equipos, asignación de roles y  funciones, reestructuración de procesos internos, incorporación o desvinculación de personas, etc.
  5. Promueve las acciones de desarrollo más adecuadas para cada persona, equipo y organización. Asimismo podemos ofrecerte los programas y contenidos de desarrollo que mejor se adapten a las necesidades de tu compañía.
  6. Encuentra entre nuestro pool de expertos los coaches y mentores que las personas de tu organización necesitan para pasar al siguiente nivel, acelerar su integración y alineamiento en el equipo o alinear las prioridades y dinámicas entre departamentos.

 

Contacta con nuestro equipo de especialistas que analizará el contexto de la compañía en al que abordar un análisis para optimizar tus equipos a través de big data, empleando nuestras herramientas de assessment y metodologías de intervención. Te ofreceremos una solución personalizada y a medida.

 

CONTACTO

 


¿Tu organización necesita evolucionar y adaptarse al nuevo entorno? Aquí tienes El Programa Augere de Agentes de Transformación

 

El programa Agentes de transformación proporciona las claves para crear el entorno propicio para la integración y el alineamiento de equipos en una organización y abordar el proceso de cambio que esta necesita desde la responsabilidad individual y una visión sistémica.

A través de metodologías de coaching individual, de coaching sistémico y de mentoring se desarrolla un itinerario de desarrollo con alto impacto en el alineamiento de las personas y equipos, cultura y estrategia de negocio de la compañía.

A quién va dirigido

El programa está orientado a aquellas personas que están llamadas a desempeñar su rol como agentes de transformación dentro de la organización, que quieran desarrollar las habilidades para facilitar conversaciones poderosas en su organización, acompañar a equipos en su proceso de alineamiento e integración y construir dinámicas productivas y relacionalmente efectivas entre personas, departamentos y organizaciones.

 

Contacta con nosotros para más información.
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¡HABLEMOS!

¿Qué te ofrece Augere como equipo?

Hoy en día no podemos dejar de reconocer el papel crucial que, más allá del liderazgo individual, los equipos directivos y de colaboradores tienen en el éxito de sus compañías.

El alineamiento de un equipo implica que éste comparta una misma cultura dando coherencia a su actuación y proporcionando un impacto único que sirva de modelo inspirador para el conjunto de la organización.

Es por ello que más allá de convencer a los colaboradores desde la lógica del negocio, basada en el sistemático descenso en cascada de los objetivos de la compañía, los directivos necesitan entusiasmar desde la emoción, construyendo vínculos relacionales de calidad y con visión a largo plazo, basados en el respeto a la singularidad de cada cual, que faciliten la explosión del talento en todos los rincones de la organización y su compromiso con el negocio de la compañía.

El efecto espejo en los equipos de trabajo

Por Enrique Recuerda/ Socio y Coach Ejecutivo en Intiva

Plantearemos para comenzar la siguiente adivinanza:

“Supongamos que dos bomberos entran en un bosque a apagar un pequeño incendio.
Al final, cuando salen y van a la orilla de un riachuelo, uno de ellos tiene la cara llena de ceniza y el otro está inmaculadamente limpio. Pregunta: ¿cuál de los dos se lavará la cara?”

A primera vista parece que será el que está cubierto de ceniza quién se lave la cara aunque viendo cómo se formula la pregunta uno espera la segunda derivada.

Merece la pena dedicar unos instantes a darle una vuelta para encontrar al menos una solución lógica. Tanto si se quiere contrastar la respuesta como si uno no puede esperar más, diremos que el bombero inmaculadamente limpio será el que se lave la cara. Veamos…

El bombero que tiene la cara sucia verá al otro bombero con la cara limpia y pensará que está igual que él por lo que no necesitará lavarse. Y viceversa: el bombero que tiene la cara limpia verá que su compañero tiene hollín por todas partes, y se dirá a sí mismo: «Yo también debo de estar sucio, tengo que lavarme.»

Mientras cobra sentido la explicación puede apreciarse lo importante de este mensaje en cualquier entorno social. En este caso hablaremos sobre “El efecto espejo en nuestros equipos de trabajo”.

Destacar dos ideas: ¿qué imagen tiene nuestro equipo de nosotros como responsables? y ¿qué imagen queremos transmitir siendo conscientes de este efecto?

Respondiendo al primer punto, observar a nuestros ayudantes puede darnos mucha información sobre cómo nos están percibiendo. Si en nuestra compañía se muestran seguros, confiados, dinámicos, alegres, optimistas o, por el contrario, son temerosos, pesimistas, desalentados, etc. Prestar atención a su actitud frente a nosotros nos puede revelar mucha información actuando ellos como espejo.

Este efecto está relacionado con las llamadas “neuronas espejo”, descubiertas hace algunos años por los neurocientíficos(*). Dichas neuronas se activan cuando observamos el comportamiento ajeno, y explican nuestra tendencia a sentir y hacer lo mismo que la persona que estamos viendo. Esta capacidad, distintiva del ser humano, puede convertirse en una carga cuando la persona en cuestión emite señales incorrectas o poco útiles.

El rol de jefe de equipo o responsable es, sin duda, una figura muy observada y un referente dentro de las dinámicas de trabajo. En este punto, la actitud y el comportamiento de la persona que dirige, tendrá un fuerte impacto en sus colaboradores.

Respecto a la segunda cuestión, qué imagen queremos transmitir, mantener una actitud de tranquilidad, de control, de positivismo, de superación, etc. hará que nuestros equipos absorban toda esta energía, proyectándolo en su persona y, por tanto, en su trabajo.

Por otro lado, si dejamos que sensaciones como el agobio, la premura, la preocupación, la inseguridad y el miedo al fracaso nos invadan, estaremos enviando una señal clara y directa a nuestros colaboradores, que interiorizarán este estado impactando negativamente en su ánimo, en su rendimiento y en su orientación a resultados.

Animamos a hacer la prueba, a mirar a alrededor. Atendiendo a la expresión de nuestros ayudantes percibiremos qué es lo que ven y, por tanto, qué es lo que les está llegando de nuestra forma de liderar.

Para acabar, lanzar una pregunta de reflexión: ¿qué imagen tiene nuestro equipo de nosotros como responsables? y ¿qué imagen queremos transmitir siendo conscientes de este efecto?

 

(*) Estudios realizados por Giacomo Rizzolatti.

Liderazgo del equipo

Por Francisco Giménez Plano/ Fundador y CEO de Augere

Como continuación del artículo introductorio a esta serie, hacíamos referencia a los cuatro niveles de liderazgo que conforman el Augere Leadership ModelTM, y del post publicado en el que profundizamos en el nivel de liderazgo individual, orientado al desarrollando un claro sentido de liderazgo de uno mismo que permite a las personas actuar desde su madurez y equilibrio personal aportando lo mejor de sí mismas para enfrentar los retos que se generan a su alrededor.

Abordamos en este artículo el segundo de los niveles, el liderazgo del equipo, enfocado en construir una cultura de líderes que se relacionan con líderes, más allá de la cultura de líderes-seguidores, estableciendo un vínculo fuerte basado en el sentido de camaradería y de propósito compartido para alcanzar resultados extraordinarios.

A modo de recordatorio, el Augere Leadership ModelTM está configurado por dos niveles más:

El nivel organizacional, entendida como el espacio relacional que se crea entre los departamentos de una compañía, que permite superar los “silos” que se generan por la falta de alineamiento, y

El nivel de construcción de comunidad, en el que generamos un sentido de comunidad que nos permite crear un vínculo sólido entre los stakeholders de la compañía, de manera que éstos no sólo quieran pertenecer a ella sino que, además, quieran permanecer en ésta en el largo plazo.

Todos somos líderes

El liderazgo es algo personal, no algo que se atribuye a quienes en su tarjeta aparece la palabra manager o director. Construir una cultura de liderazgo pasa por contagiar al conjunto de la organización el virus por el que las personas quieran desplegar sus capacidades y talentos en beneficio de la organización, asumiendo la responsabilidad y el compromiso de ponerlos de forma activa al servicio de ésta de manera estratégica.

El resultado es construir una cultura organizacional en la que todas las voces del sistema son escuchadas en tanto que existe la consideración de que todos somos líderes que se relacionan con otros líderes, trascendiendo así, de las relaciones entre líderes y seguidores que esperan las directrices, el impulso motivador y la visión de los primeros.

Claros ejemplos de este enfoque de liderazgo son compañías como Gore o Morning Star en las que claramente el liderazgo está basado en el reconocimiento de los demás y en una cultura de participación y corresponsabilidad como hemos señalado.

Alineamiento del equipo

Desde nuestra experiencia, en estos últimos años trabajando con una amplia variedad de equipos, hemos podido constatar cómo el alineamiento es el factor determinante del éxito en la ejecución y, en consecuencia, se refleja en los resultados.

Uno de los significados que tiene el verbo alinear es “vincular a una tendencia ideológica, política, etc…” (Real Academia Española). Aplicado al entorno de la empresa entendemos el alineamiento como la vinculación a una idea, a un proyecto, a un grupo o a una estrategia.

El reto que nos planteamos es cómo conseguir un alto grado de vinculación en los equipos. Existen algunos factores que crean alineamiento dentro de un equipo:

  1. Un número significativo de personas del equipo actúan como auténticos líderes.
  2. Las personas que forman parte del equipo están conectadas poderosamente.
  3. Las personas se sienten conectadas emocionalmente con el proyecto a llevar a cabo.

Para ilustrar la importancia de este aspecto, basta señalar los resultados del estudio realizado por Norton y Kaplan para el diseño del Cuadro de Mando Integral sobre 200 grandes empresas, del que se desprendía que en el 90% de las compañías se consideraba que una verdadera comprensión de la estrategia orientada a la acción influiría significativamente en el éxito de las mismas; menos del 60% de los directivos creían tener una comprensión clara de la estrategia, y de éstos, sólo el 30% consideraba que se había implantado eficientemente; finalmente, menos del 5% de los empleados en- tendían la estrategia de la organización. ¿Qué resultados podemos esperar de una organización que refleje este esquema de alineamiento?

Liderazgo para el alineamiento del equipo

En Augere, definimos el liderazgo como la habilidad de expresar una visión que aporta sentido a los stakeholders de una organización y, desde el ejemplo personal, se sientan influenciados e inspirados para alcanzar determinados resultados sea cual sea su rol en la organización.

Cuantas más personas ejerzan el liderazgo y aporten valor, más aumentan las posibilidades de alcanzar el máximo potencial de la organización y utilizar todos los recursos para la ejecución efectiva.

Cuando nos referimos al liderazgo tenemos en mente a un líder auténtico y al servicio del equipo y, por ende, al sistema en su conjunto, que genera vínculos a largo plazo y construye una cultura de alto desempeño. Una persona que transmite su pasión y contagia a otros su compromiso, conecta y vincula emocionalmente a las personas con las que se relaciona, y por último, crea movimiento, impulsa el cambio cuando es necesario para ir más allá y abordar con éxito los retos que existen en el día a día en la ejecución.

Es un liderazgo que surge en cada rincón del equipo y aparece en el momento en el que la ejecución lo requiere. Aparece en el lugar en el que no estamos mirando, aparece por sorpresa y se manifiesta y se amplifica si el clima es rico, respetuoso y fértil. En el entorno empresarial actual necesitamos este liderazgo, que inspire y genere confianza en el conjunto de la organización, que haga emerger a líderes en todos los niveles de la misma y que cree un ambiente de cercanía donde fluya la creatividad y la iniciativa. Un liderazgo basado en un propósito común que alinee y sintonice emocionalmente a las personas en una misma dirección.

En este contexto, es el equipo el que establece los mecanismos para sostener una visión global, revelar y trabajar con el campo emocional, ampliar la toma de consciencia acerca del impacto que tiene cada persona y la influencia en el clima de cada uno de los miembros desde su rol. Cuando el equipo adquiere consciencia de sí mismo y de su funcionamiento, se adapta y se autorregula de forma natural.

El líder de líderes se enfoca en observar el impacto y la interacción de las personas de acuerdo a sus roles, tanto los funcionales y los informales, como los roles ocultos que pueden surgir ante acontecimientos determinados, co-crea con el equipo el ambiente que necesita para que cada persona aporte su máximo potencial y actúe como un auténtico líder y en diseñar y mantener un contenedor en el que el equipo avance alineado con respecto a los objetivos y expectativas a trabajar, a través del diseño de una alianza sólida para todos.

Construir vínculos relacionales de calidad

Más allá de convencer a los colaboradores desde la lógica del negocio, basada en el sistemático descenso en cascada de los objetivos de la compañía, las organizaciones necesitan contagiar entusiasmo y así tocar la emoción. Para ello, solo existe una vía, la de construir vínculos relacionales de calidad y con visión a largo plazo, basados en el respeto a la singularidad de cada cual, que faciliten la explosión del talento en todos los rincones de la organización y su compromiso con el negocio de la compañía.

Desde este punto de vista, esas relaciones de calidad se basan en la combinación de un doble concepto, el de integridad y el de integración: integridad, como el respeto de la diferencia y aprovechamiento de los talentos singulares de cada uno de los miembros del equipo, ya que en la diversidad, la creatividad, la innovación y la cooperación está buena parte del éxito de las organizaciones hoy en día, y no en el individualismo y la uniformidad, que muchas veces cometemos el error de llevar a las organizaciones, al rodearnos de otros como nosotros para así sentirnos más seguros. Los verdaderos líderes se sienten incómodos con el statu quo y buscan de manera constante la diversidad y la innovación; e integración, puesto que es la unión en equilibrio de los diferentes elementos y talentos singulares lo que da la fuerza, al compartir una visión, una misión y unos valores como equipo y organización.

El manejo en equilibrio de estos dos aspectos, integridad e integración, va a permitir construir una organización fuerte y una compañía sostenible para todos sus stakeholders, en tanto que los mismos criterios expresados sirven para construir las relaciones con clientes, proveedores y accionistas.

Manejar la discrepancia

El liderazgo del equipo implica disponer de herramientas para que éste cree el contexto en el que puedan desarrollarse relaciones auténticas, respetuosas y de calidad, orientadas a la consecución de los resultados esperados. Si en algún momento las cosas no van bien, surgen conflictos o discrepancias, el equipo ha de disponer de las habilidades para explorarlas de forma positiva y que puedan ser gestionadas sin perder el alineamiento. Revelando cuáles son los intereses comunes que nos acercan pero que a veces viven escondidos detrás de nuestras posiciones, normalizando lo que está ocurriendo para encontrar nuevas maneras de comunicación positiva que fomenten la vinculación y unión.

Es importante para ello tomar conciencia de los elementos que intoxican el sistema y minan las relaciones personales. La negatividad, el desprecio, la rigidez, el aislamiento, son algunas de las toxinas más habituales que nos llevan al individualismo y la desintegración de un equipo. Desde esa conciencia el equipo podrá crear un nuevo flujo comunicativo que le lleve a sostener una red de sólidos vínculos y un fuerte sentimiento de unión. Esta intensa vinculación crea un espacio libre de amenazas y respetuoso para poder expresar de forma segura los diversos y cambiantes sentimientos y emociones que surgen en el día a día del equipo en la búsqueda de sus objetivos. Por tanto, convertir las conversaciones difíciles en conversaciones valientes.

El vínculo en torno a un objetivo común

Las personas que forman parte de un equipo alineado muestran un alto grado de conexión emocional con la idea o el proyecto en el que están trabajando. Un deseo de alcanzar juntos lo que se hayan propuesto.

Las personas deseamos pertenecer a un grupo en el que se compartan valores, ilusiones y sueños. Nos vinculamos con aquello que tiene un significado para nosotros, aquello en lo que encontramos sentido. Autores como Jonas Ridderstale y Kjell A. Nordström, en su obra Karaoke Capitalism aplican el concepto de “tribu” en el contexto de la empresa para explicar este tipo de vinculaciones entorno a algo que nos une y por lo que nos sentimos comprometidos. Nosotros hablamos de comunidad.

La concepción racional del ser humano nos ha llevado a pensar que con informar de la visión, misión y valores era suficiente. La verdadera vinculación se produce a nivel emocional. Estamos cableados emocionalmente como asegura Antonio Damasio. Para vincularnos necesitamos emocionarnos, entusiasmarnos con el proyecto, nos debe transmitir energía, nos debe asombrar. Si no resuena a nivel emocional no enamora, no se crean experiencias positivas emocionales y no vincula. Nos vincula un fuerte deseo y un alto compromiso con algo que deseamos que ocurra. Algo muy acorde con nuestros valores.

Liderar dando soporte a los colaboradores

Robert Dilts nos proporciona algunas de las claves que traemos a colación del papel del líder de líderes en relación al soporte que este ha de dar a sus colaboradores. En este sentido el rol del líder constructor de comunidad se ha de enfocar a:

  • rear las condiciones más apropiadas en entornos cada vez más cambiantes y guiar a los colaboradores para que consigan sus objetivos.
  • Clarificar qué es lo que se espera de ellos y de qué manera han de realizarlo, entrenando los comportamientos más adecuados para optimizar el desempeño, a través de un feedback constante, que no sólo se enfoque a la tarea, sino también en cuidar de la relación.
  • Desarrollar actitudes y nuevas estrategias que les permitan “aprender a aprender” constantemente y potenciar habilidades y aptitudes que faciliten su adaptación a esos entornos y situaciones cambiantes.
  • Conocer al colaborador, lo que es importante para él y estimular aquellos valores que contribuyan a potenciar su éxito, tratando de eliminar presuposiciones que le limitan en su desempeño.
  • Reconocer la individualidad de cada persona, su esencia y talentos singulares y apadrinar su crecimiento personal y profesional, de tal manera que ésta descubra todo su potencial y lo ponga al servicio de una misión común como equipo u organización.

Dibujar y ayudar al colaborador a descubrir un propósito que trascienda del propio individuo y se traslade al nivel del equipo, organización y sociedad, respondiendo a las preguntas de para qué o para quién hacemos lo que hacemos y con quién más lo compartimos.El líder constructor de comunidad, además de mantenerse alineado en sí mismo y de cuidar del alineamiento del equipo y de dar soporte a los líderes que lo forman, pone foco en dos niveles más, el alineamiento e integración de la organización en torno a un propósito común y el impacto en la construcción de comunidad con los stakeholders de la compañía. En próximos artículos abordaremos cada uno de estos niveles para completar la serie que describe el Augere Leadership ModeloTM.