Liderarse a uno mismo para liderar a los demás

Por Germán Antelo, Executive Coach

Este es un tema que llevo trabajando hace tiempo con mucho directivos y personas ubicadas en los mandos intermedios de las empresas, ya que me parece de vital importancia para quienes tienen la responsabilidad de liderar un equipo de trabajo.

Es prioridad número uno, que una persona pueda liderarse a si mismo porque sino le será tarea casi imposible hacerlo con los demás, es como si queremos hacer un viaje de 1.000 kilómetros y el coche tiene aceite, gasolina y ruedas para 100 kilómetros, seguramente no llegaremos y nos traerá muchos problemas en el viaje.

Por eso hay que comenzar por el principio, y ése es, que el líder se explore y se conozca, que detecte cuáles son sus valores y cómo los honra en su vida, tanto en la profesional como en la personal. Además debe estar en sintonía con ellos, tiene que resonarles para poder honrarlos y luego será necesario que defina una Visión de Vida, junto a la huella ó el impacto que quiere dejar con su vida.

Por supuesto que lo que menciono en el párrafo anterior, no se logra en un día!, pero con trabajo constante se puede realizar en un tiempo bastante corto.

Una vez que la persona haya detectado sus valores, su esencia, su SER, deberá profundizar en darse cuenta lo importante que es para él y su gente que se sienta líder, debe sentirlo, saborearlo, debe ver el beneficio y el impacto que sus actos, acciones provocan en los demás, para que sea consciente de lo que produce.

Cuando la persona se sienta líder de si mismo, en todo el sentido de la palabra, recién ahí podrá comportarse como el referente frente a su equipo. Será el momento en cual deberá transmitirles su estilo, sus sueños, ilusiones, el cómo quieren que le recuerden como líder, que les aportará y además proponer al equipo, que juntos construyan una filosofía y una forma de trabajar que los identifique como equipo dentro de la empresa.

Deberá cuidar temas de real importancia, como la escucha, la comunicación al equipo de todas las cosas, detectar y plasmar los valores del conjunto, visualizar donde quieren estar en un tiempo, como van a recordar a este equipo, cual es el rol que cada miembro ocupa, fijar objetivos claros, realizables y que provoquen ilusión alcanzarlos, deber el líder crear una filosofía de trabajo para centrarse en él, porque cuando se crea todo esto y se logra el desapego al resultado, el éxito llegará solo, sin forzar, sin presionar, sin ansiedades, ni nervios, será consecuencia de algo muy bien hecho.

Con varias herramientas y técnicas de Coaching todo esto que cuento se logra, ya lo he visto y lo he experimentado, porque cuando se empieza por la raíz del árbol y se la cuida con pasión, el resultado será un árbol fuerte, sano y con mucha producción de frutos, pero cuando no nos centramos en el crecimiento y cuidado de la raíz, al pasar el tiempo, ése árbol no será saludable.

Es necesario centrarnos en la persona de aquellos que lideran equipos, que descubran realmente quiénes son y qué tienen para ofrecer, que sientan la necesidad de liderar y transmitir, de modo que su equipo lo agradecerá y a su vez obtendremos de ellos una alta eficiencia, efectividad y beneficios.